"Cliente habitual desde 1999 y viajero frecuente en hoteles de la misma categoría, he podido constatar la calidad de los servicios prestados por el Bristol, dignos de un hotel de 5* pero con algo más, un ambiente familiar: ¡te sientes como en casa!
Visita guiada con un embajador de Bristol
La ubicación es perfecta, equidistante de la estación de tren y del centro de la ciudad.
Las habitaciones son más amplias que las de los hoteles de esta clase, con una excelente ropa de cama, lo que supone una gran ventaja cuando se viaja por negocios.
En las nuevas habitaciones " Unique !", la decoración es contemporánea pero al mismo tiempo crea un ambiente cálido, tradicional y acogedor. Este es el toque especial del Bristol, un hotel de categoría mundial que no pertenece a una cadena internacional: estamos en una gran casa familiar.
Un secreto de la casa: ¡siempre pido una habitación en el patio! Son tan silenciosos que uno pensaría que está en el campo..."
En cuanto al servicio
"Siempre encuentro el mismo equipo histórico, estable y fiel durante años. Aquí hay un espíritu familiar, que es muy agradable.
Con el tiempo, se han desarrollado relaciones más personales con cada uno de ellos, sin dejar de ser muy profesionales: una forma de simpatía que nunca es intrusiva ni familiar, basada en una relación franca y honesta.
A diferencia de algunos hoteles de estilo familiar, los propietarios no dudan en invertir en la modernización de la oferta, y esto se aplica tanto a las habitaciones como al vestíbulo, el gimnasio y el restaurante Côté Cour.
Hemos desarrollado una larga relación con su chef Bruno Marchal. He tenido la oportunidad de privatizar el restaurante para organizar eventos a medida con más de 50 invitados, pero también banquetes, cenas o comidas de negocios. Bruno es una persona creativa con la que es posible inventar menús a medida ".
Antoine R.
